Las
personas que intentan suicidarse con frecuencia están tratando de alejarse de
una situación de la vida que parece imposible de manejar.
Muchos
de los que cometen intento de suicidio están buscando alivio a: Sentirse
avergonzados, culpables o una carga para los demás.
Sentirse
como víctimas. O sentimientos de rechazo, pérdida o soledad
Gérard
Labrunie, nace en París en 1808 , poeta y traductor francés, pasaría a la
historia como Gérard de Nerva , y también como una figura marginal en su época
del romanticismo francés, la posterioridad ha convertido a Gérard de Nerval en
el poeta romántico por excelencia de su lengua y en un gran precursor de la
poesía contemporánea.
Su padre
Stephen Labrunie era médico militar del ejército napoleónico de la Gran
Armada fue destinado al Rin. Su madre
María Antonieta Margarita Laurent, era hija de un rico comerciante francés.
Murió de
meningitis en Glogów en Silesia, en la actual Polonia, mientras acompañaba a su
marido. La muerte de su madre, cuando aún era un niño de dos años, marcó no
sólo su vida sino también su obra. Fue educado por su tío-abuelo, Antoine
Boucher en la campiña de Valois hasta 1814, cuando fue enviado a París con su
padre.
Nerval
cursó estudios de medicina, que nunca llegaría a concluir. En 1827 inició la
traducción de Fausto de Goethe, que entusiasmó al propio autor hasta el punto
de llegar a preferirla al original alemán. Goethe, junto con Hoffmann y Heine,
le influyeron decisivamente.
Conoció
a Víctor Hugo, asistió al estreno de Hernani y estuvo entre los organizadores
de la famosa batalla. Por participar en los motines de 1832 y por escándalo
público entró y salió de la cárcel un par de veces. Antes de cumplir veintiséis años, ya había adoptado el
seudónimo de Nerval, nombre que tomó de un pequeño dominio de su familia,
heredó 30.000 francos en oro.
El
dinero lo invirtió en viajar a Italia, y
a su vuelta a París ,vestido como un dandy
se movió, por los ambientes teatrales , salones y
cafés, como si hubiese nacido en ellos, haciendo de su casa, el centro de
reunión de iluminados y ocultistas.
Por
aquella época, el, amor llamó a su
puerta , era una actriz inglesa llamada
Jenny Colon, , personaje que aparece en Sylvie, la primera de las nouvelles que
reunió bajo el título Las hijas del fuego
a de su gran amor por la actriz.
Sin
embargo , ella se casó con otro hombre y murió poco después. Nerval lo largo de
su vida, sufriría muchos reveses de este tipo y tuvo que ser internado en un
psiquiátrico en varias ocasiones. Esconder se esconder se escondería entre sus
novelas, porque él, el mundo real era el
infierno. “Esta vida es un tugurio y un lugar de mala reputación. Me da
vergüenza que Dios me vea aquí “, escribió.
Emprendió
un viaje por Europa, parte del cual realizó acompañado por Alejandro Dumas, con
quien firmó un contrato, y por Teófilo Gautier, compañero suyo desde el liceo.
En Viena se enamoró de M. Pleyel, una discípula de Liszt. A los treinta y tres
años, en 1841, le detuvieron desnudo cuando iba tras una estrella que, según
él, le guiaba hacia Oriente.
Este
hecho tuvo como consecuencia una estancia en la clínica del doctor Blanche, el
primero de los internamientos que se irían sucediendo desde entonces en
adelante, pues las alucinaciones fueron un suceso común en su vida.
Una vez
que salió de la clínica, su editor le adelantó dinero y emprendió el deseado
viaje a Oriente. Un año después regresó para escribir Escenas de la vida Oriental
(1851), una obra maestra del periodismo poético
En 1855
apareció Aurelia, que mezclaba sueño y realidad y fue considerada una de las
obras fundacionales de la literatura moderna. Ese mismo año 26 de enero,
durante , sus momentos más sagrados, hizo una crónica de su mente perturbada
con todo detalle. Acabó ahorcándose el 26 de enero de 1855.
A los
cuarenta y seis años realizó un último viaje a Alemania y publicó Las quimeras
(1854), la serie de herméticos sonetos que lo consagraron como el precursor de
Mallarmé y del simbolismo, y que sería uno de los libros de cabecera de los
abanderados surrealistas, más de medio siglo más tarde.
En un
amanecer del invierno de 1855, un borracho encontró el cuerpo de Nerval
cubierto de nieve en el callejón de la Vielle-Lanterne. En sus bolsillos
llevaba las últimas páginas de Aurelia o el sueño y la vida, su mejor novela,
que se publicaría póstumamente en 1855, junto con las admirables crónicas de La
bohemia galante
A pesar de que se le halló
ahorcado con su propio cinturón, ninguno de sus amigos aceptó que Nerval se
hubiese quitado la vida; afirmaban que planeaba un viaje a Grecia y que nadie
se ahorcaría con el sombrero puesto. Dos días antes había dejado a su tía, en
cuya casa habitaba, una nota: "No me esperes esta tarde, porque la noche
será negra y blanca".
Fernández,
Tomás y Tamaro, Elena. «Biografia de Gérard de Nerval». En Biografías y Vidas.
La enciclopedia biográfica en línea [Internet]. Barcelona, España, 2004.
Disponible en https://www.biografiasyvidas.com/biografia/n/nerval.htm [fecha de
acceso: 13 de enero de 2024].