DESDE EL MADERO POESÍA






Cerrados los ojos , el Cristo de  la  Buena muerte
camina la empedrada  calle, sabiendo lo  que sucede  .

En las aceras, sus fieles amigos,  asisten mudos ,
viendo como por sus heridas cae la sangre.

Al llegar al Gólgota , le  clavan en el madero.

 Y allí desde el madero, contemplando  a la masa,
acepta su destino sin murmurar ni siquiera una palabra.

Pocas veces su boca se abre ,de esas pocas veces se le escucha decir  –“Madre aquí tienes a tu hijo. Hijo aquí tienes a tu madre-.

Desde el madero el Cristo de la  Buena suerte grita con estertores de muerte “ Heli . Heli. Lama sabact ta ni “- “Padre en tus manos encomiendo mi espíritu”-.    .

Y allí , solo con los suyos , que el amaron hasta el final, descansa sobre el madero , mudo, en silencio sin desear a nadie mal   


De  chione  india Dafne