Desde que el hombre tuvo constancia de la existencia de
este escurridizo
pez, se ha sentido atraído por él.
Viajero, por excelencia , lleva la
etiqueta de ”misterioso”, quizá debido a
fantásticas leyendas, cuyo ambiente era la profundidad de los océanos y sus inmensos e interminables
horizontes .Estamos hablando, claro está, de la anguila.
Fue en el siglo XVIl, cuando el
científico italiano Francesco Redi, naturalista , médico y poeta , indicó que
las anguilas no nacían en los ríos, sino en el mar. Y como ocurre con todas , o
en la mayoría de los casos, de esta u otra índole, ni le creyeron, ni le hicieron caso .
Y es que Francesco había observado que las anguilas adultas
bajaban por el río en otoño , y que las que lo subían en primavera eran las
anguilas jóvenes. Lo que nunca llegó a imaginar el gran recorrido que estos
animales hacían para ir a desovar al mar
, y luego de vuelta a los ríos, la friolera de
¡cinco años ! Uno para marchar y
cuatro para volver .
Tendría que llegar el año 1922
cuando Johannes Schmidt, descubrió que el Mar de los Sargazos , era el lugar
predilecto de este pez para el nacimiento de su prole. Existían muy variadas
razones, veamos : la temperatura del agua ( tibia) , una alta salinidad ,
además de un gran numero de peces, crustáceos, moluscos , gusanos e insectos,
tenía gran riqueza en su plancton , lo cual le hacía ser el mejor lugar del
mundo para el desove.
Las huevas de las anguilas , tiene
un crecimiento muy lento, aunque cuando llegan a la superficie , ya tienen algo
más de dos centímetros de longitud.
Impulsadas por las corrientes, se
encamina hacia las costas europeas o americanas( según donde se haya realizado
el desove, y de quien proceden).
Las ve llegar hasta las costas europeas,
hasta el mes de marzo. Primero “desembarcan” en
la costa gallega, para posteriormente recibirlas en las costa
portuguesa, para finalizar su viaje en las del cantábrico y en costas
francesas. No es que se pequeñas , aunque
las que llegan en octubre y noviembre son de mayor tamaño.
La transformación en adultos , o sea
en anguilas, lo hacen una vez en aguas
dulces.
Lo mismo que eligieron en Mar de los
Sargazos para desovar , también siguen ciertos patrones para hacerlo en los
ríos, pues depende también de la temperatura del agua .
Es en el mar Mediterráneo donde se
nota su presencia, a partir del mes de Noviembre .
Casi un ejercito de angulas impide
que los alevines, tengan apenas espacio para avanzar, ni siquiera moverse, por
lo que se amontonan unas sobre otras, y así avanzan en línea recta. Desconocen
que los anguleros , provistos de una especie de salbardo de malla tupida…les
están esperando. Y lo hacen en los pasos tradicionales , como son las paredes
de los puertos y las orillas de ríos y de rías, dispuestos, cómo no , a
conseguir un buen botín.
Le es más bien difícil a una anguila
llegar ala madurez( 5 años), por lo que merodeará en el fango de los ríos.
Cuando presienta algún peligro , correrá esconderse en cuevas o bajo las rocas.
Durante la noche se dedicará a
buscar una buena vivienda , en donde refugiarse durante el día.
Con la punta de su boca, explorará
hasta conseguir encontrar el lugar que más le guste, para más tarde excavar y
enterrarse debajo de una capa de limo , que puede tener entre 3
a 4
centímetros de espesor.
Hasta ahí , la cosa marcha,
pero… como tiene que respirar, las
burbujas pueden delatarla y ser descubierta por sus depredadores.
Es España tenemos puntos donde la
tradición de la pesca de la anguila es muy arraigada , entre ellas La Albufera – Valencia,
donde se utilizan artes muy industrializadas , ya que como normalmente se las
pecas es con una caña larga , con un puntero de grosor mediano, y un carrete de
los denominados de mar ( de tamaño
regular) .” Un a vez capturada la anguila ,
se la saca del agua. El pez se retuerce, se enrolla, se anuda y azota el aire.
Debido a su piel viscosa es
imposible sujetarlo con la mano “
Las crías de las
anguilas, no son otras que las angulas que nacen entre las algas del Mar de los Sargazos. Esta
zona tiene una especial particularidad. Se trata de unas pequeñas vesículas de
aire , entre 400 y 800
metros de profundidad, que sirven como sustento a las
jóvenes larvas, a la vez que hace también de tanatorio, pues allí quedan
recogidas las madres que mueren después del acto de reproducción.
Estos bichitos son
transparentes e incoloras, que al nacer miden 5 mms, y que al cumplir el mes ya
se alimentan del plancton , y ya llegan a los 15 mms de largo. Pasados dos
meses, miden 25 mms, y viviendo a 50 metros de profundidad.
El momento de viajar
hasta Europa ha llegado , y sin abandonar los 50 metros de profundidad,
durante el día , la corriente del Gulf Strean o la del Golfo , los llevarán ,
luego por la noche subirán hasta los 20 metros de profundidad.
En ocho meses habrán
conseguido tener 43 mms, para dos años
después, cuando vean el relieve de las costas europeas , habrán crecido 42 mms ( o sea los 85 mms).
No todas las angulas
sienten la necesidad de viajar para desovar, así que se pasan la vida en las zonas salobres de las desembocaduras de las rías .
Lo cierto , y es una
pena , que ya no podemos ver en la ría de Bilbao los famosos anguleros.
La zona angulera por excelencia era la comprendida entre el puente del Arenal
, y el puente giratorio o el de “ perro chico” ( moneda con la se pagaba para
pasar por el puente).
Sin embargo , yo estuve
casi diez años viviendo en la zona del Puente de San Antón , y en la escaleras
que están a la altura de la estación de Euskotrenvideak, hace la friolera de
catorce años, nos encantaba ver a un padre con su hijo de unos ocho años, con
sus cedazos y sus faroles en busca del
cotizado animal . Sin embargo duró poco la alegría , pues un buen día , ya no
volvieron
CURIOSIDADES MUY
CURIOSAS
A nuestros vecinos , los
franceses, no les gustan.
Y en el año 2013 , en las pescaderías , el kilo de angulas costaba
¡ 1.300 euros! , y faltaban días para la Navidad , lo cual nos hace pensar que se
pondrían por las nubes .
Aunque es un pez de carne insípida, suave y casi imperceptible ,
se pone sabroso cuando en una cazuela individual , de barro , se pone un
chorrito de aceite de oliva virgen , un diente de ajo y una guindilla roja, que
darán sabor al plato. Cuando el aceite está muy caliente, se echan las angulas
, dejándolas un par de minutos mientras se remueven , luego a la mesa, pero con
cuidado que queman la mar, como aquí se dice. Existen personas que les gustan
con mucho aceite
Recabada información en Wikipedia
/ pescadosymariscos.consumer.es