- - ¡Mira mis zapatos! ¿A que son bonitos? -
- - No sé cómo puedes andar con ellos. ¡Con la punta
que tienen, debes tener los dedos comprimidos! -.
- - ¿Y tú dices que vas a la moda? No tienes ni idea
-.
Esta u otras conversaciones, se podrían escuchar en torno a la
moda del calzado: zapatos, mocasines, bailarinas, sandalias, botas, zapatillas,
zapatillas de deporte, alpargatas, chanclas, mocasines, zapatos de tacón (de
aguja, finos, altos, plataforma), y así, una larga lista.
En la moda de los zapatos, debe situarse en primer lugar, la
comodidad, por encima de la estética,
por mucho que digamos. - ¡Qué cómodos que son! -, ya que se corre un peligro…
que no sea correcta la función que realizan las 35 articulaciones del pie, que
están formados por 26 huesos divididos en tres grupos principales: huesos del
tarso, huesos del metatarso y falanges.
– Huesos del tarso (7): Astrágalo, Calcáneo, Escafoides,
Cuña medial, Cuña intermedia, Cuña lateral y Cuboides.
– Huesos del metatarso (5): Primer metatarsiano, Segundo
metatarsiano, Tercer metatarsiano, Cuarto metatarsiano y Quinto metatarsiano.
– Falanges (14): Primera falange proximal, Segunda falange
proximal, Tercera falange proximal, Cuarta falange proximal, Quinta falange
proximal, Segunda falange medial, Tercera falange medial, Cuarta falange
medial, Quinta falange medial, Primera falange distal, Segunda falange distal,
Tercera falange distal, Cuarta falange distal y Quinta falange distal.
ACLARACIÓN El dedo
gordo del pie o “Hallux” no tiene falange medial, por eso hay 14 falanges en
lugar de 15 articulaciones que se apoyan en el pie. Que, a buen seguro, sin palabras,
pero con dolor y con malformaciones, protestan.
El 80% de las personas que superan los 60
años, tiene complicaciones en los pies, cuyas malformaciones no son de nacimiento, ya que un estudio llevado a cabo, ha llegado a una
resolución,” únicamente el 2% de los
niños tiene defectos en los pies”. Así que también , podemos nosotros , llegar a esa misma conclusión ,
ser los culpables de dichas dolencias , debido al calzado que usamos, más para
la vista, que para el propósito para el cual
ha sido creado( comodidad y protección).
RESUMIENDO
Las féminas son en un 70% las que más acuden al podólogo y al traumatólogo, y
ya sabemos el motivo: Dedos deformes, traumas en los tobillos, callosidades,
juanetes, durezas, bursitis, artrosis y malestar general, es lo que conlleva
los pies comprimidos por el uso de zapatos que no debían ponerse.
Para terminar, diremos que es aconsejable seis centímetros
de tacón en las mujeres, y dos centímetros para el hombre, ya que de esta
manera el peso sobre el talón, es el idóneo, para que la función de la pantorrilla,
sea la correcta, por lo que evitaremos: molestias de cansancio, calambres y
esguinces.
Llegados a este punto, relataremos , lo más resumido que se
pueda
LA HISTORIA DEL CALZADO
Nuestros antepasados, utilizaban pieles de animales (oso y
ciervo), como calzado, para evitar las aristas de las piedras y de las rocas, tal
y como llevaba el hombre de Ötzi, que vivió hacia 3300 a. C., llamado así por
ser descubierta su momia en el valle de Ötztal, tramo de los Alpes italianos.
La causa de la momificación, fue debida al frío extremo y perenne que existe en
dicha región.
Un par de sandalias,
originarias de Egipto, que estaban fabricadas con paja trenzada, es el calzado
más antiguo que se conoce. En los tiempos bíblicos se entregaba una sandalia
como un signo de juramento o para cerrar un contrato. Y si se hacía un agujero
en la suela, era en señal de repudio, por parte del marido a su esposa.
Más tarde, el calzado fue el icono que diferenciaba a los
ricos de los pobres, amén de las viviendas, ropa y esclavos. El calzado de los dignatarios,
sobre todo el del faraón, era de primera calidad (y da fe de ello, unas sandalias
(las primeras en cuero y con adornos de oro), halladas en el baño del faraón – niño
Tutankamón. Además los egipcios tenían
la costumbre, de enterrar a los finados,
con sus zapatos, no fuese que en el más allá, tuviesen también caminos pedregosos.
En la Grecia antigua, la diferencia entre ser libre , esclavo o criminal , estaba en que
el primero llevaban zapatos, el segundo iba descalzo y el tercero llevaba
pesados zapatos de madera, aunque el calzado más utilizado, era la sandalia ,
sin olvidar otro tipo de calzado … la bota . No trascurrió mucho tiempo hasta
que los griegos dejasen a la sandalia para ciertas tareas y crear zapatos que se adaptasen para los
soldados o para los sacerdotes. Esta adaptación, tendrá buena acogida entre los romanos, que la aplicarán a sus zapatos.
Con la llegada de la Edad Medía, se produce un cambio en el
calzado, lo estético antes de lo que” para lo que se le necesita”.
Los moros calzaban
babuchas o pantuflas allá por el siglo XII.
En las cortes francesas, pues son las primeras en admitir
los zapatos, cobra fuerza el gusto a lo atrevido, o vamos a
tapar posibles defectos en los pies,
una moda que será impuesta por los
personajes públicos de la época.
Existieron monarcas que marcaron su impronta en el calzar,
por ejemplo, Carlos VIII puso de moda el tacón de punta cuadrada, con el fin de
disimular que tenía seis dedos. En cuanto a Luis XIV, pone tacón, para que su
corta estatura pase desapercibida. Este calzado era incómodo originando a más
de uno y de dos, dolores insoportables en los tobillos. Eduardo de IV de Inglaterra,
proclamar un edicto en el cual se comunicaba la limitación de la punta del
calzado, y que dicha largura, debía corresponderse con el status social de la
persona que lo calzaba. Por su parte otro monarca inglés, conocido por su gusto
de enviar a la Torre de Londres, a todo aquel que le estorbase, quiso hacer
también de renovador en el calzado, y pasó de los zapatos puntiagudos a los de
punta ancha
Zapatos chinos
Los primeros zapatos vistos en la Europa moderna fueron
utilizados en las cortes francesas entre los siglos XIII y XIV. Eran tan
incómodos y pesados que originaban fuertes dolores en los tobillos.
Cabezas reales rodaban en el cadalso al filo de la
guillotina, y sin ellas, la plebe es quien ahora define el calzado, es la
Revolución Francesa –zapato plano y sandalias que tienen reminiscencia de la
antigua Roma.
El siglo XIX lleva a sus espaldas el progresivo desarrollo
industrial, y con él, el calzado también sufre un cambio. Botines, el cubre
zapatos o polainas Y en Filadelfia, se fabrica el primer par de zapatos, en los cuales, el derecho
era diferente al izquierdo, hasta entonces, en todo el mundo, habían sido los pares
de zapatos iguales
No obstante lo más chic de los chic, está por llegar. Son
unos zapatos de caballero que aparecieron en Escocia e Irlanda , en donde de
cuando en vez, se les conocía como Balmorals, y que en la Universidad de
Oxford, en el siglo XIX , tuvieron gran reputación, por su elegancia , su diseño, planos en cuero,
con algún pequeño adorno o pequeñas perforaciones en el pespunteado doble
a lo largo de la puntera , con cinco o seis parejas de orificios , por
donde se pasan los cordones( uno por cada zapato) para poder atarlos y a los
que se conoce como zapato Oxford .
Pero un segundo zapato, esta vez el zapato Derby, tiene como
diferencia del Oxford, que las dos aletas de cuero con las perforaciones, para
pasar los cordones, se cosen junto al fondo.
Siglo XX la mujer tiene su trocito de historia, en el tema
del calzado, e irán incorporándose, despacio al tema laboral, sustituyendo al
hombre que tiene partir a la guerra.
Regresa el zapato bajo, y con la guerra escasez de ciertos
materiales que tienen que ser sustituidos por otros menos delicados, y goma
para las suelas.
Época de los 50, el tacón que se lleva es el de aguja, alto
y delgado, y la cómoda y baja bailarina, que es difundida a través de la moda
en pasarelas y en el cine y televisión. Diez años más tarde, regresan los
zapatos altos, se habla de los mocasines y de las plataformas, iniciándose un
nuevo planteamiento, cada pie su zapato, cada zapato, una persona, eso sí, por
variedad que nadie llore
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