Vino al mundo en la ciudad sevillana de Estepa, en la
primavera del año 1866
El señor Camargo, padre de Joaquín, fue un varón muy activo,
pues tuvo 16 hijos, correspondiendo a Joaquín tener el número 10, entre sus
hermanos.
El apodo del Vivillo, le viene a nuestro personaje, por su
agudeza y agilidad mental, las cuales manifestó a muy temprana edad
Nada le unía a su padre, pues este, lo maltrata sin piedad
haciéndole trabajar en lo que salga, en varios cortijos y haciendas, por lo que
con 14 años, se escapa, y no regresa hasta el fallecimiento de su padre, doce
años después.
Contrae nupcias en Estepa, con una señora de nombre Dolores,
y poco tiempo después, decide probar fortuna como contrabandista de tabaco, en
Gibraltar. Sin embargo, no tardará mucho en tener que esconderse de la Guardia Civil,
dando comienzo a su vida de bandolero, acompañado por otros rufianes, tales
como El Ignacio, El Soniche y el Vizcaíno, allá por la Serranía de Ronda
Tras una extensa serie de tropelías, en las que se funden:
leyenda y realidad, generosidad y maldad , uno de sus golpes que más fama le
dio, sucedió en la localidad de Setenil
de las Bodegas en 1893 , dejando sin forro en los bolsillos y vacías a sus repletas carteras a unos feriantes que
regresaban, de las venta de ganado en la
feria de Villamartín , amén de robar , en 1903 , a un hacendado propietario,
Pedro Guzmán , 2000 duros , y dejar amarrado a 7 hombres que estaban con él .
El Vivillo, sería arrestado y encarcelado en repetidas ocasiones.
Absuelto entre 1912 y 1913, decide escribir sus Memorias, al
periodista Miguel España.
Para ganarse la vida, intenta valerse de sus dotes de
caballista, como picador de toros dentro de la cuadrilla del torero Morenito de
Alcalá, si bien la experiencia dura poco y sueña con Argentina acompañado por
su esposa e hijos, para, según declaraciones de Joaquín, dedicarse a negocios
mercantiles.
Cuatro años después, su esposa, Dolores fallece, dejándole en
una, tan profunda depresión, que decide quitarse del medio ingiriendo, una
solución de cianuro potásico, un 16 de julio de 1929.
Joaquín Camargo Gómez “El Vivillo·”, que había salido airoso,
de sus encuentros con la justicia, al no tener esta, cargos consistentes contra
él, no pudo evitar el sufrimiento de una pérdida tan importante…su esposa
