1966 Point Pleasant y cercanías, en Virginia Occidental, que
es una pequeña población al lado del río Ohio, la gente comienza a hablar sobre
una extraña y terrorífica que ha sido vista en los alrededores andando por los
campos.
El relato más exacto correspondía a dos parejas que circulaban,
de noche, en su coche y pasaron por delante de una fábrica que en sus buenos
tiempos se dedicó a la fabricación de municiones, ahora estaba abandonada.
Uno de ellos llamó la atención de los otros tres porque se
había fijado en dos puntos rojos que brillaban en la oscuridad.
Detuvieron el coche para aproximarse el punto desde donde
salían aquellos puntos rojos.
Horrorizados descubrieron que lo que ellos creían ser dos
puntos brillantes, en realidad eran los ojos de una criatura: “Tenía forma
humana, pero de mayor tamaño, mediría aproximadamente unos 2 metros de altura y
unas enormes alas plegadas contra sus espaldas”.
Después se volvieron al coche, para llegar hasta el juzgado
del condado que más cerca les quedaba, y poner en conocimiento del sheriff, que
estuviese de guardia su odisea. Por los cristales de coche veían como aquel
monstruo les seguía durante buena parte del trayecto.
La noticia apareció en los medios de comunicación locales, y
durante las dos semanas siguiente, hubo gente que dijeron ver al extraño ser,
pero de pie o caminando, solo un testigo aseguró que voló pegado casi a su
coche, en las inmediaciones de la fábrica.
Pero lo mismo que despertó la curiosidad, aquel caso se fue
desinflando y los informes fueron cada vez menos escasos. para desaparecer en
gran medida, después del 15 de diciembre un año después, 1967, una fecha que
las personas de Point Pleasant no olvidarían
El derrumbamiento del Silver Bridge, el puente colgante que unía
Point Pleasant con Kanauga a través del río Ohio, que se llevó la vida de 46
personas pues al ser hora punta el puente estaba abarrotado de coches.
1975, ocho años más tarde, John Keel) escritor y periodista
investigador forteano (esta palabra corresponde al apellido de Charles Hoy Fort,
investigador estadounidense, conocido por dedicarse al estudio de hechos no
solucionados por la ciencia de su época), escribe el libro The Mothman Prophecies,
en el que vincula a ambos hechos, con otras tantas actividades paranormales,
que aparentemente, se dieron en la zona por aquel entonces.
En el 2002 se estrena una película basada el dicho libro “Mothman:
La última profecía” interpretada por Richard Gere.
“Todavía trastornado por la muerte de su esposa en un
extraño accidente automovilístico, el periodista John Klein sufre una avería en
su coche en plena noche. Al pedir ayuda, descubre sorprendido que se encuentra
en un pequeño pueblo de West Virginia, a cientos de kilómetros de donde creía
estar. La sheriff local le informa de que una serie de inexplicables sucesos
han tenido lugar en los últimos tiempos. Después de analizar varios casos y de
consultar al especialista en fenómenos paranormales Alexander Leek, Klein
empieza a sospechar que la explicación del extraño suceso podría deberse a la
presencia de Mothman, una misteriosa y legendaria criatura que anuncia el
desastre y la muerte. Esta sospecha lo perturba hasta tal punto que sus más
profundas convicciones empiezan a tambalearse y tiene la terrible impresión de
hallarse en el umbral de un universo aterrador y desconocido. (FILMAFFINITY)
Película y novela explicaron dichos fenómenos, desde un
punto de vista sobrenatural, los cuales Keel relacionó con teorías sobre os
ovnis
En cambio, para otros analistas, los relatos sobre seres
humanoides que vuelan, tienen semejanza con los otros que proceden de otras
partes del mundo.
1970 Mawna, Cornualles. Diferentes informes hablan sobre una
figura con rasgos de búho, ojos rojos y garras como pinzas, a la que se le
apodó como “el hombre búho”
Además, se han descrito varios paralelismos con Jack Spring
-Heeled, personaje legendario de la Inglaterra victoriana, quien se aparecía de
improviso a las jóvenes, y que según se creía, para evitar ser capturado,
saltaba por encima de altos muros.
Finalizaremos hablando de otro ser volador norteamericano,
que cohabitaba con la realidad y la ficción. Se trata del diablo de Nueva Jersey.
Este ser tuvo aterrorizada la zona boscosa de Pine Barrens,
del sur de Nueva Jersey, durante una semana del año 1909.
Los testigos presenciales equiparaban a la bestia con
animales tan distintos como un ave, la grulla y un marsupial, el canguro.
Unos informes, bastante detallados, lo describían de 1 m de
altura, cabeza parecida a la de un perro de raza Collie, cuello largo, alas de
unos 60 cms de ancho y patas traseras como las de una grulla, pero las pezuñas
de un caballo.
Para caminar lo hacía sobre las dos cortas patas delanteras
levantadas que finalizaban en garras.
Se encontraron huellas localizadas en la nieve, que entonces
cubría la región, a veces en los tejados. También fue vista volando.
Desde hace menos de un siglo, se habían referido
avistamientos similares de un ser alado en la zona, por personajes tan
conocidos como Stephen Decatur, uno de los protagonistas de la historia
americana y fue un auténtico compatriota y héroe de guerra entre los años
1812-1820. También habló de este ser, el hermano mayor de Napoleón, José
Bonaparte.
Si bien se han seguido dando apariciones, ocasionales, hasta
el presente, nunca con la misma frecuencia que durante el pánico de 1909,
cuando grupos armados persiguieron a la bestia y algunas escuelas y comercios
tuvieron que cerrar temporalmente.
Aspecto
Figura humana con alas y ojos rojos resplandecientes
Tamaño
Según los testigos de unos 2 m de altura
Poderes
Capacidad de volar y según algunas teorías clarividencia
Hábitat
Point Pleasant, en Virginia Occidental y localidades
próximas
Recogida información en:
El bestiario fantástico de Tony Allan
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