Desde hace 19.000 años, los nativos americanos han habitado
California y es posible que habitaran aquellas tierras desde mucho antes. Se
especula que estos primeros habitantes cruzarían “un puente terrestre” a través
del estrecho de Bering de Asia a Alaska hasta llegar al sur, ahora denominado
California, aunque a falta de documentación que lo acredite se deja en suspense
Trece mil años tiene un esqueleto descubierto en California
que con posibilidad el más antiguo de Norteamérica, al que se le llama “el hombre
de Arlington Springs”, descubierto en la isla de Santa Rosa.
Debido a los suministros de alimentos y gracias a un clima
templado, la población aumentó, estimándose cera de unos 300.000 indígenas, los
que allí vivieron, antes de la llegada de los europeos
Como el clima era benigno, los indios que vivieron allí
usaron muy poca ropa. En algunas áreas más frías utilizaron pieles en invierno.
Las epidemias como la malaria
aniquilaron a la población indígena de California. Su población se redujo considerablemente
2000 en 1800 a cerca de 1500 en 1900.
Tenemos de decir, que las tribus ubicadas en California eran
tribus aisladas de otras regiones, inclusive, de las mismas tribus que estaban
dentro del territorio californiano. El motivo de este aislamiento no es otro
que las formas del relieve, de la zona, entre ellas las altas cordilleras,
lagos y desiertos
Nuestro recorrido comienza visitando la primera tribu
Los Yana
Yana,
significa “Gente” en su lengua Hokan. A principios del siglo XIX, los Yana
vivían en el valle superior del río Sacramento y las estribaciones orientales
adyacentes. La elevación de su territorio oscilaba entre los 300 y los 10.000
pies.
Agarrándose con fuerza a su territorio, aguantaron las primeras
expediciones de los colonos blancos.
1848 un carpintero estadounidense llamado James W. Marshall que
se encontraba buscando oro en el río Americano, o de los Americanos, que nace
en las Sierra Nevada y confluye en el río Sacramento, por fin lo descubre, por
lo que miles de personas llegaron al territorio Yan, espantando a los ciervos y
arruinando los puestos de pesca de los indígenas
Las luchas entre los blancos y los Yana, eran muy
descompensadas, ya que los primeros tenían armas de fuego.
1865 la masacre de Three Knolls originó el exterminio de la
tribu.
El último indio salvaje en América de la tribu Yana fue
Ishi, el cual vagó fuera de su territorio ancestral cerca de Oroville,
California allá por 1911. Algunos descendientes Yana fueron a vivir a Redding
Ranchería, reserva federal en el condado de Shasta, California; había 20 en
1973, en el censo de 1990 nadie se identificó como Yana.
La tribu de los Yana eran cazadores y recolectores, formaban
pequeños grupos dirigidos por un jefe que tenía relativo poder y quien sugería
las grandes o pequeñas acciones a seguir, lo que no existía era una autoridad
política centralizada.
Habitaban un territorio maravilloso, pues existían arroyos
de montaña, algunos prados y por allí y por allá colina rocosa, todos aquellos
conjuntos les ofrecían variados recursos. Hacían recolección de bellotas,
raíces y tubérculos a los que asaban antes de comerlos y también se alimentaban
con, semillas de girasol, nueces de castaño de indias, avellanas, piñones y
frutos.
Tomaban en la corrientes, truchas y salmones. Se hacían con
conejos y codornices empleando trampas. Y como quizá ritual, para que les diese
buena suerte, se colocaban una máscara de ciervo para poder acercarse y
atraparle ya que carne era altamente codiciada.
Los Yana de norte recolectaban mejillones de río y lombrices
de tierra, saltamontes, así como pequeños roedores, que entraban en su dieta alimenticia.
En cambio, los Yana del centro, disponían de un pantano
salado, cuya sal era recogida, inclusive recogida por el resto de los grupos
Yana. Con la llegada del calor, algunos de los recursos mermaban, así que su
próximo destino eran las montañas, donde cazaban ciervos y se alimentaban de
bayas y semillas, y donde habitaban en cuevas o construían campamentos temporales.
De los ciervos, conejos, gatos monteses y osos, utilizaban
sus pieles para hacerse ropa y mantas. En el tiempo cálido, las mujeres
utilizaban una especie de delantal y los hombres taparrabos. Y con la llegada
del tiempo frío, usan polainas que les cubrían desde las caderas hasta los
tobillos.
Trabajaron el hueso para la fabricación de punzones, así
como el caparazón de los mejillones para obtener cucharas y espátulas. Con
bayas de enebro, magnesita, perlas, conchas y garras de osos, fabricaban collares
y orejeras y los Yana con mayor categoría, llevaban diademas de plumas y se
pintaban cara y cuerpo en ocasiones muy especiales.
Peces y cangrejos, caían en las grandes y resistentes redes
que fabricaban a la vez que la madera del tejo, de la caoba, del avellano, así
como el enebro, servían para hacer los arcos. En cuanto a las puntas de las
flechas, estas se hacían con: basalto o puntas de obsidiana, que llevaban en
una caja hecha con piel de nutría.
La piedra para morteros y bases para cestas practicando una
cestería muy rudimentaria trenzando fibras vegetales. En cuanto al comercio con
otras tribus, no era muy significativo, intercambiando cueros de venado y sal
por obsidiana y magnesita, pero poco más se conoce de sus costumbres.