No sé quién
eran, los que opinan que Beverly Allitt sufre el síndrome de Münchhausen, en el
que la persona se inventa enfermedades o se autolesiona para ser atendido por
alguien. O los que creen que simplemente tiene “predisposición para matar”.
Si bien,
aunque, sus motivos no estén muy claros, Allitt es una asesina en serie
inglesa, enfermera de profesión, quien fue la coordinadora de la unidad de
cuidados intensivos neonatal del Hospital Grantham y Kesteven, Lincolnshire, responsable
del asesinato de cuatro niños, así como el intento de asesinato de otros tres y
de provocar graves lesiones corporales a otros seis niños,
Los
crímenes fueron cometidos en un período de 59 días entre febrero y abril de
1991 en el Hospital Grantham y Kesteven, Lincolnshire, donde Allitt fue
empleada como enfermera.
Nace en 1968.
Nada nos lleva a sospechar, que tuviese algún problema, pues tuvo una niñez de
lo más normal. Es más ya desde jovencita, se ofreció a cuidar a unos niños en
sus ratos libres, mientras cursaba sus estudios de enfermería.
Finalizados
sus estudios, encuentra trabajo en el Hospital Grantham Kesteven.
Fue tras la
muerte de Claire Peck cuando el personal médico comenzó a sospechar del número
de paros cardíacos en la sala de niños, y se llamó a la policía. Se descubrió que
Allitt era la única enfermera en servicio durante todos los ataques a los
niños, y también tenía acceso a las sustancias inyectadas.
¿Como los
asesinaba? Administró grandes dosis de
insulina al menos a dos víctimas y una burbuja de aire de gran tamaño fue
encontrada en el cuerpo de otro, pero la policía era incapaz de establecer como
se llevaron a cabo los ataques
Tenía
planeado acabar con la vida de once pequeños más antes de ser capturada in
fraganti. El "Ángel de la muerte”, cometió su primer crimen en 1991. Un
pequeño de siete meses llamado Liam Taylor, fue su primera víctima.
En mayo de
1993, en Nottingham Crown Court, recibió 13 condenas a cadena perpetua por los
crímenes. Justice Latham, dijo que Allitt era un "peligro serio" para
otros y era poco probable que se considere lo suficientemente segura para ser
liberada. Está
detenida en el Hospital Rampton Secure en Nottinghamshire
El juicio
de Allitt recomendó un cumplimiento efectivo mínimo de 40 años, que la
mantendría en prisión hasta al menos el 2032, cuando tendrá 64 años de edad.
Los motivos de Allitt nunca han sido plenamente explicados.
Como
decíamos en al principio, se consideró la hipótesis de que Allitt mostraba
síntomas de trastorno facticio, también conocido como el síndrome de Münchhausen
por poder (o por delegación),11 un trastorno mental que podría explicar sus
acciones.
Víctimas
Liam Taylor
(siete semanas) - fue admitido a la sala por infección en el pecho y fue
asesinado el 21 de febrero de 1991.
Timothy
Hardwick (once años) - un chico con parálisis cerebral que fue admitido a la
sala después de tener un ataque epiléptico. Fue asesinado el 5 de marzo de
1991.
Kayley
Desmond (en ese entonces tenía un año de edad) - admitida a la sala por
infección en el pecho. Allitt intentó asesinarla el 8 de marzo de 1991 pero la
niña fue reanimada y transferida a otro hospital, donde se recuperó.
Paul
Crampton (en ese entonces cinco meses) - admitido a la sala por infección en el
pecho el 20 de marzo de 1991. Allitt intentó asesinarlo con una sobredosis de
insulina en tres ocasiones ese día antes que fuera transferido a otro hospital,
donde se recuperó.
Bradley
Gibson (en ese entonces cinco años de edad) - admitido a la sala por neumonía.
Sufrió dos paros cardíacos el 21 de marzo de 1991, debido a las sobredosis de
insulina suministrada por Allitt, antes de ser transferido a otro hospital,
donde se recuperó.
Yik Hung
Chan (también conocido como Henry, en ese entonces dos años de edad) - admitido
a la sala por una caída el 21 de marzo de 1991. Sufrió un ataque de saturación de oxígeno antes de ser transferido a otro hospital, donde se
recuperó.
Becky
Phillips (dos meses) - admitida a la sala por gastroenteritis el 1 de abril de
1991. Se le administró una sobredosis de insulina por Allitt y murió en su casa
dos días después.
Katie
Phillips (en ese entonces dos meses de edad) - la gemela de Becky fue admitida
a la sala como una precaución tras la muerte de su hermana. Tuvo que ser
reanimada dos veces después de inexplicables episodios de apnea (que luego se
descubrieron ser sobredosis de insulina y potasio).
Luego de la
segunda vez que paró de respirar, fue transferida a otro hospital, pero, esta
vez, había sufrido de daño cerebral permanente, parálisis parcial y ceguera
parcial debido a la falta de oxígeno.
Clarie Peck
(quince meses) - admitida en sala tras un ataque de asma el 22 de abril de
1991. Después de ser puesta en un ventilador, fue dejada sola al cuidado de
Allitt durante un breve intervalo durante el cual tuvo un paro cardíaco. Fue
reanimada pero murió después de un segundo paro cardíaco, de nuevo seguido de
un período cuando ella fue dejada sola con Allitt