Existen personajes, monumentos y edificios, que a pesar de ser
inanimados atraen a multitud de público, por su historia, por lo que
representaron o representan, por sus construcciones, por su país, por u montón
de motivos más.
Y eso le ocurre a la famosa inquilina norteamericana, de origen francés,
de la Isla Ellis e Isla de la Libertad, con su porte de dama de la Roma clásica
Esta estatua, se ha convertido en uno de los monumentos más
representativos de Norteamérica y reconocida a nivel mundial. Como antes hemos indicado,
se gestó en Francia, país donde varios de sus elementos principales estuvieron
expuestos, con un objetivo, recaudar fondos para su financiación.
A mediados del siglo XIX, sentados en un pequeño despacho en la casa
del escultor francés Frédéric Auguste Bartholdi, compartía conversación con el profesor
de derecho en el Collège de France, en París, una de las instituciones de
enseñanza más prestigiosas a nivel mundial y presidente de la asociación
abolicionista francesa y ferviente defensor de la Unión, Édouard René de Laboulaye.
Tenemos que decir que Laboulaye era, durante la guerra civil
norteamericana, el bando que ganó en 1865, y que él sugirió A Bartholdi de
erigir un monumento a la independencia norteamericana, y que debería partir de
un esfuerzo conjunto entre ambas naciones, Francia y Estados Unidos.
Bartholdi pensó en un monumento gigantesco, con la figura de una mujer
vestida con túnica, portando en su brazo alzado la antorcha de la libertad.
Los artífices de la obra, fueron el escultor Frédéric Bartholdi en
colaboración con el ingeniero Gustave Eiffel, el mismo que hizo la estatua
emblema de París. Las piezas de cobre
fueron construidas en los talleres de la empresa «Gaget, Gauthier et Cie», en
1878. Las planchas de cobre fueron una donación de Pierre-Eugene Secrétan. Los
trabajos de precisión se encargaron al ingeniero Maurice Koechlin, hombre de
confianza de Eiffel,
Primero intentaron levantar la estatua de la Libertad en Egipto
Este proyecto megalomaniático fue ofrecido primero al Jedivato (fue un
estado autónomo tributario del Imperio Otomano, creado y gobernado por la
dinastía de Mehmet Alí tras la derrota y expulsión de las fuerzas de Napoleón
Bonaparte que pusieron fin a la breve ocupación francesa del Bajo Egipto). Ya
que este país estuvo desde 1867 hasta 1914, en manos turcas) con el título
“Egipto llevando la luz a Asia”.
Luego surgió la idea de plantar una Estatua de la Libertad en la
entrada al Canal de Suez como si fuese el Coloso de Rodas.
Sin duda la Estatua de la Libertad bebe su forma, su perfil a la Roma clásica.
La figura de la mujer sería la diosa de la libertad romana, Libertas, llevando
una corona de 7 puntas, representando el sol, los 7 mares y los 7 continentes. En
su brazo derecho alzado, porta la antorcha de la libertad iluminando el mundo.
En la mano izquierda, Libertas sostiene una tabula ansata romana, que
es una lámina rectangular con asas laterales trapezoidales y anilla de
suspensión en el margen superior. Inscripción distribuida en tres líneas,
realizada a base de puntos incisos, representando la ley, con la fecha de la
declaración de independencia en números romanos.
En uno de sus pies hay una cadena rota y el otro está adelantado, avanzado
la libertad.
Todo un proyecto que, a los ojos de los hombres y mujeres de aquella época,
pertenecía a un loco soñador y a los que le animaban para hacerlo.
En 1870, Bartholdi había conseguido ejecutar la primera maqueta de la
Estatua de la Libertad, pero no contó con la guerra entre el Segundo Imperio
francés y el Reino de Prusia (Franco-Prusa (1870-1871), en la que sirvió como
mayor (comandante) de la milicia.
LA ANTORCHA TENÍA UN BALCÓN
Había que despertar el interés entre la gente para conseguir que
aportase dinero, así que se efectuaron numerosos actos públicos y exhibiciones.
En aquel momento, Bartholdi, toma una decisión; construir primero el brazo con
la antorcha y a cabeza, eso sin tener completado el diseño final de la estatua
ni del pedestal.
Agosto de 1876, Exposición Universal de Filadelfia, contará el brazo y
la antorcha, de la futura Estatua de la Libertad y su exposición en ella, pues
se tenía un stand promocional: bocetos del proyecto y la venta de entradas para
subir al balcón, otro método para la consecución de dinero, en el otro lado del
otro lado del Atlántico.
Bartholdi, estaba seguro, que si la gente, podía ver o visitar, la
parte de un todo, o sea del monumento y palparlo, esta recibía un mensaje: el
proyecto está en marcha, y que cuando este estuviese completado iban a poder
ascender al mismo balcón, en lo alto de la estatua.
Tras Filadelfia, se exhibió en Madison Square Garden del siglo XIX en
Nueva York. Donde al parecer las imágenes que dejó son un tanto angustiosas. Por cierto, el exterior del brazo estaba cubierto de láminas de cobre
remachadas que no inspiraban, que se diga, mucha seguridad.
Para llegar hasta la estrecha balconada con una exigua barandilla, colocada
a unos 139 metros de altura, tenía que hacerse a través del brazo de la gigantesca
estatua, pero iba a ser que no. Cuando finalmente se construyó el monumento, se
montó el brazo tal cual estaba, con balcón y entrada a la antorcha.
Subir al balcón de la antorcha tuvo que ser una experiencia increíble,
ya que ofrece un punto de observación inigualable de 360º, desde el cual es
posible ver tanto el océano como el skyline (Horizonte) de Nueva York o New
Jersey.
A pesar de todo, llegar hasta el balcón de la antorcha, era tener una
experiencia increíble, puesto que desde allí el paisaje que se observaba, de 360
grados, era impresionante: ver tanto el océano, como el skyline (Horizonte) de Nueva York o New
Jersey.
La cabeza no corrió mejor suerte, aunque en Francia, esta, estuvo expuesta
en la Exposición Universal de París de 1878, dónde se vendían tickets para
entrar y subir al observatorio de la corona.
Hasta 1916 algunos agraciados visitantes
pudieron disfrutar de esta experiencia, puesto que se prohibió, debido a un
confuso acto de sabotaje durante la Primera Guerra Mundial que se produjo en
Nueva York.
Se cuenta, que unos espías alemanes, consiguieron volar un depósito de
municiones ubicado en el muelle de Black Tom, a poco más de 800 metros al este
de Liberty Island, donde está la estatua, que, por cierto, técnicamente es New
Jersey, no Nueva York.
Dicho armamento iba a ser destinado al bando aliado en Europa, si bien
los Estados Unidos aún no había entrado en guerra.
Dos años después, de iniciarse la Primera Guerra mundial, 1916, y poco
después de la media noche, de aquel 30 de julio, se sucedieron varias explosiones
en Black Tom. A las 2:08 se produjo la primera y mayor de una serie de detonaciones.
El brazo de la Estatua de la Libertad, recibió fragmentos de aquellas detonaciones.
Cuando las autoridades inspeccionaron los daños, estimados en 100.000$ de la
época, prohibieron el acceso a la antorcha al considerar que la estructura del
brazo ya no era segura.
Es durante la rehabilitación de 1984-1986, cuando se retira la
antorcha original, que se encontraba a la izquierda, cortándola por la base, y
se instala una nueva, a la derecha. El diseño fue totalmente distinto, pues
según los encargados de su colocación, está con oro de 24 kilates.
Entonces se cerró la puerta de acceso y con el paso de los años, cayó
lentamente en el olvido.
La antorcha, retirada, quedó instalada, en el hall de
entrada al monumento, donde quedó expuesta al público. La llama nueva tiene un
diseño completamente cerrado. Tan solo pueden acceder al interior el personal
de mantenimiento, fundamentalmente para cambiar las bombillas que iluminan el
fuego.
El año 1984, se desconoce de quien partió la idea, de no plantearse,
el acceso del público a la antorcha, destruyendo irreversiblemente, una de las
mayores atracciones de Nueva York, aunque parezca de locos.
Desde luego, tenemos que reconocer, que cualquiera, no puede acceder a
la antorcha: su altura y por qué debido a que es de bronce, le abrazan una
media de 600 impactos de rayos al año
En cuanto a visitar el observatorio de la corona, que estuvo cerrada
durante 8 años, tiene que ser con reserva previa, y después de conseguir salvar
la distancia subiendo sus 354 escaleras.
En la Estatua de la Libertad han ocurrido al menos tres suicidios a lo
largo de los años. Desde los ataques del 11 de septiembre solo se permitió el
acceso de visitantes al pedestal de la escultura. Funcionó como un faro hasta 1902.
Altura de la estatua, desde la antorcha hasta la base 46,05 m. Altura
total del monumento, desde el suelo hasta la antorcha 92,99 m. El escultor uso
como modelo a su madre, Charlotte Beysser
Recabada información en:
https://listas.20minutos.es/lista/curiosidades-la-estatua-de-la-libertad-301920/
https://st-listas.20minutos.es/images/2011-09/301920/3163569_640px.jpg?1315533953