EL TERCER HOMBRE CHARLES LINDBERG



Otro posible caso sobre el tema del tercer hombre, nos lleva hasta la figura del piloto Charles Lindbergh, convirtiéndose en una de las de las más conocidas.
Lindbergh nació en Detroit, Míchigan, un 4 de febrero de 1902 – en el seno de una familia de inmigrantes suecos.
En 1919, se decide a   participar en un reto muy especial realizar en solitario un vuelo trasatlántico sin escalas entre Nueva York y París, con un premio de 25 000 dólares ofrecido por el filántropo francés nacionalizado estadounidense Raymond B. Orteig

El Spirit of St. Louis, nombre del monoplano de un solo motor que Lindbergh pilotaría, despegó del aeródromo Roosevelt (Long Island) el 20 de mayo de 1927 y tras un vuelo de 33 horas y 32 minutos, aterrizó en el aeropuerto de Le Bourget, cercano a París.

Al tiempo que cruzaba sobre el Atlántico, llegó un momento en el que Charles   experimentó la sensación de que no estaba solo. Pues en la cabina había unas figuras difícilmente definidas que se unieron a él, durante el tramo final de su viaje y que le mantuvieron despierto y alerta.


A pesar de que no se sentía con ánimo de acordarse, de ni ninguna de las frases que intercambiaron, no por ello informó que la conversación de basó sobre ciertos aspectos del vuelo   
Aquel suceso hizo que Charles permaneciese. despierto todo el trayecto. Después … después le esperaba la gloria de la victoria y pasar a la posteridad como una leyenda de la aviación no comercial

Pero, existe una gran diferencia en cómo vivió ese hecho, ya que otras personas que tuvieron su misma experiencia, aquella aparición o apariciones, tenía o tenían que ver con una intervención divina, para Lindbergh, se trató tan solo de una alucinación, aparte de que su impresión fuese que aquellos seres fueron amistosos, venían con un solo objetivo … ayudarle

Por lo que podemos llegar a una conclusión, a pesar de considerar que fuese algo irreal, esto no fue óbice, de que el encuentro fue beneficioso y que, gracias a él, pudo finalizar, con éxito el reto que se había propuesto.
¿Debemos aceptar que el tercer hombre, no forma parte   de las alucinaciones corrientes que tienden a desorientar y confundir a quienes las padecen?  Y es que nos basamos que es muy difícil que un piloto que sufre alucinaciones, pueda conducir y concluir con éxito un vuelo de esas características  

HIPÓTESIS

Una gran mayoría, tiene un mismo punto de opinión:  la alucinación de Lindbergh fue debida a la falta de sueño, aunque el psicólogo Woodburn Heron, que trabajó en La Universidad McGill -Montreal, provincia de Quebec- Canadá, opina que hay otra posible explicación: la monotonía. El término “monotonía” tal cual se menciona aquí hace referencia a la monotonía sensorial, consistente en la reducción o ausencia de estímulos externos.

Heron junto a otro psicólogo, Donald O. Hebb (padre de la biopsicología una disciplina puente entre la psicología y la biología, han realizado experimentos en tanques de aislamiento sensorial en los que se aísla al sujeto de todas las posibles fuentes de estímulo externas, con lo que se consigue que el individuo pierda la noción de su propio cuerpo. Por lo que, una estimulación monótona prolongada puede hacer que el cerebro genere alucinaciones para escapar de esa monotonía y mantenerse ocupado

Así, que nuestra mente pueda ser capaz de crear un truco o treta, que contrarreste es sensación de monotonía y aislamiento que nos pueda afectar en ciertos acontecimientos.
Poe ejemplo, no es la primea vez, que escuchamos a una persona que tiene un miembro o dos amputados, que los sigue sintiendo como si aún formase parte de su cuerpo

Tras informarnos de los diferentes casos de los que hablaremos, o hemos hablado, entre los que se encuentra el de Lindbergh, tenemos la sensación de que siempre   deben existir ciertos factores o la combinación de los mismos: el estrés, hipotermia, hipoglucemia, hipoxia, fatiga, falta de sueño, monotonía, soledad, sensación de peligro, sufrir heridas o lesiones, entre otros, para que se originen este fenómeno

En el caso que nos ocupa   apreciamos la siguiente combinación de factores: una sola persona, encerrada en un espacio mínimo, con falta de sueño, en condiciones de estrés y sobrevolando un inmenso paisaje prácticamente uniforme sin referencias externas.


Recabada información en:
           


https://es.wikipedia.org/wiki/Charles_Lindbergh
https://ep01.epimg.net/internacional/imagenes/2013/07/19/album/1374225185_460363_1374227279_album_normal.jpg