¿Qué
a los británicos les encantan los fantasmas? ¡Pues claro! y no descubrimos
ningún secreto. Desde la Torre de Londres 
Hasta el famoso barrio de Whitechapel,
donde Jack el destripador dejó su impronta, cada rincón con historia o leyenda, tiene su consabido fantasma o criatura diabólica.
Esta
vez hemos llegado a Londres y nos vamos a hospedar en el Hotel Pricing for the
Langham, cuya vida data del 1865, considerado como el primer hotel de lujo de
la city, en cuyas habitaciones, se pueden alojar miembros de la realeza como la
princesa Diana de grato recuerdo y celebridades como Oscar Wilde
Tiene
el estilo de un palacio florentino y cerca de 500 habitaciones y suites, entonces
a nadie le puede extrañar, que existan más de uno y de dos, fantasmas se hayan
visto regularmente en el hotel.
Este
hotel tiene instalado un spam muy cuco cuya profunda filosofía se basa en la
medicina china, gimnasio bien equipado, una piscina hundida, sillones
climatizados y claro no pude faltar la sauna de sal marina del Himalaya que resplandece
con un cálido tono naranja.
Como
es de esperar, y debido a la gran cantidad de prestaciones del hotel, que el
precio de su estancia ronde entre los 250€ y los 1400€ noche según el
alojamiento que se escoja.
en él se puede disfrutar de una gran cantidad
de lujos y comodidades y
Vamos
con las entidades fantasmagóricas
1 un
médico que asesinó a su mujer durante la luna de miel, tras lo cual se quitó la
vida. ¿Su perfil? Pelo gris, con aspecto de caballero victoriano, lleva capa, corbata,
con porte impecable. Pero lo que más llama la atención, es esa mirada
desafiante con la que mira con ojos completamente blancos
2
se cree que el fantasma de un príncipe alemán, que lanzó por la ventana desde
la cuarta planta, muriendo en el acto.
3 aparece,
porque así le debe gustar, completamente inmóvil, en mitad de vestíbulos y
recibidores, con un aspecto bastante demacrado y con una herida abierta en el
rostro
4
este personaje fue presidente de la Segunda República Francesa. ¿Por eso
Napoleón III, quien se hospedó en el Langham durante los últimos días de su
exilio, vaga ahora por los sótanos del hotel para no estar solo?
5 esta
aparición es muy graciosa, aunque no tiene ninguna gracia cuando arroja de la
cama a los huéspedes mientras duermen plácidamente.
6 el
pobre mayordomo que camina sin rumbo fijo por los pasillos, en plan Sandie
Shaw, o sea descalzo, si bien se empeña en mostrarnos sus calcetines con agujeros.
7 el
último de la lista, pertenece a un criado de uniforme azul claro y peluca, debe
ser el hombre del tiempo, ya que cada vez que aparece, las temperaturas caen en
picado.
Pero
todo esto no tiene nada que ver con lo que sucede en la famosa habitación 333,
que en 1973 estaba ocupada Alexander Gordon un locutor de radio de la BBC
Este
hombre algo le hizo de repente despertarse sentase en la cama y contemplar una
bola fluorescente que fue tomando palmo a palmo la forma de un hombre vestido
con ropa de noche de estilo victoriano.
Alexander
Gordon no se lo pensó más, saliendo raudo de la habitación y metiéndose en la
primera que estaba ocupada por sus compañeros de trabajo- ¡No os vais a creer lo
que me ha pasado! -
Uno
de sus colegas, aceptó a acompañarle a su habitación. El fantasma, continuaba allí
cuando entraron, aunque ya aparecía menos visible y menos amenazante, después
se desvaneció muy lentamente.
Otro
de los invitados comento que una amiga suya había visto el fantasma en la
habitación 333. Asustada le arrojó una de sus botas que lo atravesó
limpiamente. Y en 1992, un periodista estadounidense también vio una aparición
en esta habitación.
Ocurrió
que, cierto día una de los huéspedes llamó a recepción- Disculpe. Aún no me ha
subido las maletas a mi habitación –
-
¿Está seguro que se las ha entregado a los manipuladores de equipaje?
-Sí
claro. Además, recuerdo como iba vestido, un tanto atípicamente- la respuesta
te impactó
-
Disculpe señor. Esos uniformes dejaron de llevarlos ya hace unos 80 años -. El
equipaje de la mujer fue encontrado en una sala cerca del vestíbulo.
Y
ya en mayo del 2003, una dama que ocupa la 333 salió precipitadamente de la 333
sin despedirse ni decir siquiera el motivo por el dejaba el hotel. Día después,
se recibió una carta cuyo remitente era de la mujer, en la que explicaba lo
siguiente – “Mis horas de descanso fueron interrumpidas por las actividades del
fantasma, una de ellas, era mantenerme despierta, sacudiendo repetidas veces la
cama durante la noche.
Porque
cuando alguien ve un fantasma lo dice sin miedo, le escuchan, lo documentan y
pasa a formar parte de la historia del lugar, de su acervo particular, e
incluso, en muchos casos, acaba convertido en reclamo turístico.
Es
un lugar donde se cuenta que se organizó el primer “té de las cinco”. Es una auténtica
Joya Londinense y por ese motivo se ha utilizado para rodar películas como
«Golden Eye» de James Bond
Hombre
tener en casa un fantasma viste mucho, incluso nos puede valer para echar de
casa a las amistades no deseadas o
toxicas , aunque a ellos ante tal aparición , es posible , que quizá no estén
de acuerdo.
Recabada información en .
https://aminoapps.com/c/terror-amino-en-espanol/page/blog/la-habitacion-333-del-hotel-langham-de-londres/KmqZ_KnhMu0neg5zvvGzewqG5LxBrbdWEo
http://jeffkatz.typepad.com/.a/6a0120a721c2d7970b014e86cb08ff970d-pi