ESPADAS FAMOSAS ESPADA CALFATA DE ALEJANDRO MAGNO




A que se le denomina como calfata a una espada de filo curvado originaria de la Iberia prerromana. Su uso está históricamente asociado con las poblaciones del sureste de la península ibérica durante la conquista de Hispania, donde constituye una de las armas blancas nativas más emblemáticas de la Antigüedad.


Alejandro III de Macedonia, mejor conocido como Alejandro Magno (El Grande) fue el rey de Macedonia desde 336 a. C. hasta su muerte. Por su conquista del Imperio Aqueménida, está considerado como uno de los líderes militares más importantes de la Historia.

Además de conseguir la conquista del Imperio Persa, Anatolia, Fenicia, Judea, y Mesopotamia, entre otros expandiendo las fronteras de Macedonia hasta la región del Punjab.

Antes de su muerte, Alejandro había planeado volver hacia el Oeste y conquistar Europa además de querer continuar la expansión hacia el Oriente y encontrar el fin del mundo, idea que su tutor durante la niñez, Aristóteles, le había inculcado contándole historias sobre un lugar donde la Tierra acababa y empezaba el Gran Mar Exterior.

Como ilustre personaje que se precie, le rodean infinidad de leyendas y curiosidades, pasamos a contar algunas de las mismas

Su físico: Se dice que era físicamente hermoso, con un cutis blanco, y no era muy alto. También se dice que tenía una voz áspera debido a que sufrió de un trastorno congénito escoliótico (cuello torcido y deformidad de la columna)
David Bowie y sus  ojos 
Los ojos de nuestro personaje, no eran del mismo color, pues sufría de heterocromía, característica ocular en la cual un iris es de un color diferente del otro, o sea uno azul y el otro marrón.
Personalidad Tenía un temperamento violento y temerario, así como su naturaleza impulsiva. Pero su gran carisma lo convirtió en un gran líder.

¿Cómo vestía?  Siempre de acuerdo con las muchas batallas que, tras seis años de ocupaciones en el Imperio Persa, conquistase Persépolis, considerada como el centro cultural persas, creyó que, si él se vestía como uno de ellos, se los ganaría, ósea: llevar la túnica rayada, el cinturón, la corona y el vestido de los reyes persas, para profundo desagrado de los estilistas culturales en Macedonia.

Alejandro entre muchas o pocas preocupaciones, se encontraba el hecho de que su cuerpo debía oler una tradición iniciada durante la vida de Alejandro en la que se le atribuían rasgos divinos.  Y así lo hizo saber a todos durante una visita al oasis de Siwa en el 331 a.C., donde Alejandro se llamó a sí mismo abiertamente “hijo de Zeus

De su vida amorosa cabe destacar que tuvo tres esposas: Roxana, Statiera y Parysatis, aunque la primera, fue un flechazo a primera vista, y a quien descubrió cuando examinaba a unos prisioneros, quien era hija de un noble bactriano. Más tarde nacería un niño, Alejandro IV, el único hijo de la pareja

En 324 a.C., Alejandro realizó una boda colectiva en la ciudad persa de Susa, donde forzó a 92 líderes macedonios a tomar esposas persas, casándose él mismo con dos.

El saber Alejandro tenía un gran deseo por el conocimiento, amaba la filosofía y era un ávido lector. Desarrolló una gran pasión por las obras de Homero, y en particular la Ilíada (de hecho, Aristóteles le dio una copia anotada, que Alejandro llevaba consigo en sus campañas).

Leyendas. Cuenta la leyenda que en el año 333 a.C. deshizo el nudo gordiano del rey Midas. Se decía que quien lo deshiciera gobernaría toda Asia. Él lo hizo con un golpe de espada.

También se habla de la primera vez que el conquistador conoció al famoso asceta Diógenes, el Cínico, que rechazaba las sutilezas de la sociedad común y dormía en una gran vasija de barro, cuando este se le aproximó y le hizo esta pregunta – Si alguna cosa desearas, la tendrás al momento -
Y Diógenes le contestó de esta manera “apártate, me estás bloqueando el sol”. Alejandro quedó tan impresionado con la respuesta del pensador que supuestamente le dijo “Si no fuera Alejandro, me gustaría ser Diógenes”.


Coincidencias entre Alejandro Magno y Julio César: que ambos nacieron en el mes de julio y los dos eran epilépticos. Por cierto, Julio César y Octavio Augusto eran seguidores del rey macedonio. Se dice que Octavio quiso poner una corona en la imagen de Alejandro Magno en la tumba. Cuando lo hizo le rompió sin querer la nariz al busto.



Detalles. Alejandro solía rebautizar las ciudades conquistadas como “Alejandría”, pero cuando llegó la victoria más costosa de la campaña de Alejandro en la India, él fundó la ciudad Bucephala (o Bucéfala). Este nombre fue elegido en homenaje a su caballo favorito, Bucéfalo, un caballo salvaje que domó a los nueve años, y que sufrió una herida fatal en batalla.

Lo que se sabe o sus suposiciones sobre la muerte de Alejandro Magno
No se sabe a ciencia cierta como murió Alejandro Magno, aunque hay numerosas teorías conspiratorias. En el 323 a.C., Alejandro Magno enfermó después de dejar caer una taza de vino en una fiesta. Dos semanas después, el gobernante de 32 años había muerto.

Teniendo en cuenta que el padre de Alejandro había sido asesinado por su propio guardaespaldas, en el punto de mira de las sospechas, sobre la muerte de Alejandro estaban su general Antípatro, y su hijo Casandro, quien acabaría por ordenar el asesinato de la viuda y del hijo de Alejandro. A su muerte, fueron generales quienes asumieron su trono.

La tumba de Alejandro Magno nunca ha aparecido. Existe este mausoleo en Estambul 



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