Nadie
tiene la menor duda, de que los mayas fueron durante más de 2 milenios, una de
las civilizaciones mesoamericanas más poderosas, si bien poco o nada había de
su grandiosidad a la llegada de los españoles.
Todo
cabe pensar, que originariamente, fueron grupos de no más de cientos de
habitantes, que gradualmente fueron aumentando, motivado por una mayor
obtención de alimentos–, a la vez que se creaban constituciones de poder más
complejas.
Nos
encontramos en el año 1000 a.C., cuando los mayas comienzan a fundar ciudades de
miles de habitantes establecidas en del poder de la agricultura intensiva del: maíz,
el frijol, el tomate, el girasol, la yuca, el Chile, el algodón (sus semillas
se utilizaban como aceite y su flor como tejido) y la calabaza.
De
sur a norte las concentraciones urbanas, empiezan a extenderse siendo cada vez
más numerosas. La fase clásica comienza hacia 250 a.C. y se expande hasta el
año 900 de nuestra era. Es el período de máximo apogeo, en el que se cimentan y
propagan la escritura y las artes plásticas, a la vez, que las matemáticas y la
astronomía alcanzan altas cotas de complejidad.
Hacia
el final de esta época, comienzan a surgir construcciones que darán paso a
grandiosas ciudades-Estado, dirigidas por reyes todopoderosos, que luchan entre
sí, para lograr en muchas ocasiones, crear alianzas o pactos con el objetivo de
controlar, los siempre escasos recursos de tierras y súbditos.
Claro
que esa puede ser la razón, por la que nunca se agrupasen en un solo Estado,
regido por un rey o emperador común, todo lo contrario que ocurría con incas o
aztecas, que permaneciesen divididos por el hándicap la escasez de alimentos y
medios de transporte, que les impedía largas campañas militares, motivo por el cual,
cada reino solo se extendía a una distancia de tres días de marcha desde la
capital.
Jamás
ninguna ciudad, obtuvo el suficiente poder y riqueza para someter a todas las
demás mediante una prolongada campaña de conquista.
No era de extrañar que las ciudades-Estado en
este período, tenían entre 40.000 y 130.000 habitantes.
A partir del año 950 comienza las dificultades
en el llamado período posclásico, en el momento en el que se origina el progresivo
abandono de las ciudades en un ciclo errante, haciendo que muchos se decantasen
por vivir en la selva
Otros se dedicaron a fundar otras ciudades,
pero esta vez, más cercanas a las costas del Caribe, como Mayapán, que no se
libraron del abandono, durante los siglos XIV y XV tras violentas guerras
Otro
suceso estaba por llegar …la llegada de los españoles, y con el, la puntilla a
la cultura maya, que ya estaba fragmentada en pequeños y pocos reinos, cuyas
capitales también acabaron quedando despobladas.
CLASES
En
la cima del poder estaba el rey-dios, que ejercía de sumo sacerdote y cabeza
del Estado.
Después
le seguía el ejército y la administración, rodeado de la máxima pompa y un gran
ceremonial. Ni que decir tiene, que la familia real y sus familiares,
acaparaban los cargos del poder formando la nobleza cortesana y sacerdotal. Y así.
La lista continuaría con los soldados, artesanos, comerciantes los funcionarios
Él
lo más bajo de la escala social, nos encontraríamos con los: obreros los
esclavos obtenidos en las guerras. La actividad bélica era indispensable en el
mundo maya, con el fin de controlar rutas comerciales y campos agrícolas, Entre
los que se encontraban; el saqueo, para obtener esclavos, etcétera, o saquear,
obtener esclavos, etc.; o sencillamente para acabar con un Estado competidor y
hacerse con sus recursos. Pocos eran los soldados profesionales, que estaban
dedicados casi exclusivamente a formar la guardia del rey.
DETALLES
CURIOSOS
Inventaron
el chicle, elaborado con la resina de un árbol conocido como zapote, de la que
sale el chicle.
Colocaban
en la cabeza de los niños nobles, un cordón con una figurita en el extremo
que les caía delante de los ojos, muy cerca, para que al mirarla forzaran la
vista. Vamos que le volvían bizcos, pues esa deformación era un símbolo de
estatus social.
Nuestro
calendario gregoriano, se quedaba chico con el de los mayas, que, sin ninguna ayuda,
tecnológicamente hablando precisaron la duración del año solar en 365,2420
días. En el gregoriano el año dura 365,2425. En realidad, son 365,2422, de modo
que el cálculo maya está más cerca del correcto.
Si
nos parecía casi monstruoso, hacerles a los peques bizcos, ¿qué van a pensar
cuando les diga, que, deformaban las cabezas como decoración corporal atándose
tablas. No era una técnica dolorosa y estaba más generalizada entre las élites.
Y
nada de cementerios, ya que enterraban a los muertos en casa o en casa de los
vecinos. Seguramente para que el finado no estuviese solo
Lo
del deporte, tiene también su intríngulis. Sobre todo, en el de la pelota, pues
seguro que se dejarían la piel para ganarlo, ya que seguramente, jugarían de
forma lúdica, eso pensarían los que ganaban, porque los que perdían, lo perdían
todo, hasta la vida
Llegamos
hasta la escritura, de la que se decía que tenía dos definiciones: lacónica (breve) y metafórica (que tiene
significado simbólico). Vamos con un par de ejemplos: a los chicos y chicas en
edad de casarse se les llamaba «tallo florido de maíz», al que se mete en algo
que no le incumbe se le dice «¿por qué llevas un taparrabos que no te
pertenece?».
En
la mayoría de las pirámides que construyeron, los colores azul y rojo sangre, destacaban.
Como
sucedía en la cultura del antiguo Egipto, cuando un noble moría, se sacrificaba
también a sus criados para ser enterrados con él.
No
hacían distintivo del amor y el dolor, pues solo existía una palabra, para
referirse a ambos.
Como
a la mitad, poco más o menos de este artículo, indicábamos que los mayas
pudieron extinguirse, nunca lo hicieron. Por supuesto que los colones españoles
les infringieron numerosas bajas, pero casi todas o la mayoría, se debieron, a
las enfermedades, que se les llevó, del Viejo Mundo.
Se
estima que, en la actualidad, existen cerca de 7 millones de descendía maya, ya
que los primitivos mayas (cuya palabra proviene de mayo, mes de la floración) llegaron,
para establecerse en zonas de la Península de Yucatán -México, Guatemala, El
Salvador, Honduras y Belice. Es una de las civilizaciones antiguas más longevas
del continente: se dice que nació hace aproximadamente hace 3.000 años (siendo
el periodo desde 250 a 900 el más fructífero).
Formó
parte de una las culturas más avanzadas en su época, especialmente en los
campos de las matemáticas (introdujeron el concepto de “zero”) y de la
astronomía (crearon un calendario solar, predijeron eclipses…).
Al
creer en numerosos dioses, eran politeístas
Los
principales eran
Ahau
Kin: el Dios de los dioses, el ente supremo
Chac:
Dios de la lluvia
Kukulcán:
Dios del viento y del agua, representado por una serpiente emplumada
Chac
Bolay: Dios del inframundo
Ix
Chel: Diosa de la luna
Yun
Kaaz: Dios del maíz
Buluc
Chabtan: Dios de la guerra
Los
mayas presuponían que el universo estaba dividido en 3 partes: el cielo (donde
vivían los cuerpos celestes), la tierra (donde vivían ellos, con todos los
elementos de la naturaleza) y el inframundo (donde reinaban los dioses de la
muerte).
Finalizamos
citando a la medicina, otra materia que dominaban, especialmente gracias a su
gran conocimiento en herbología y medicina natural. Existen investigaciones, en
las cuales, se indican: el uso de pelo humano para suturar las heridas y
empastes para las caries.
Recogida información en :
https://www.mochileandoporelmundo.com/curiosidades-de-la-civilizacion-maya/
https://culturalmaya.com/wp-content/uploads/2018/01/Arte-de-la-cultura-maya.jpg
https://hablemosdeculturas.com/wp-content/uploads/2018/11/pinturas-mayas-1.jpg